VICTOR MANUEL GUZMAN VILLENA
Llamase Masonería al estudio
de las ciencias y la práctica de las virtudes; entendemos por ciencia lo que
todos entendemos por tal, es decir, las razones del por qué de las reglas para
hacer bien alguna cosa; y por virtud, el ceñimiento a las reglas del buen vivir
y la práctica constante del bien, por amor al bien mismo, y nada más. La
Masonería es una institución de índole compleja, que carece de religión, por
existir todas en su seno y no tener, lo que las excluye a todas, sin predominio
de ninguna; no tiene patria, porque ello le quitaría su carácter eminentemente
universal; carece de raza, porque ella subsiste bajo todos los climas; no tiene
color, porque entonces negaría la virtud, cualidad susceptible de encontrarse
en cualquier hombre negro, amarillo o blanco, pobre o rico, grande o pequeño.
Los que afirman que la
Masonería está en pugna con ésta o aquella religión, son personas que ignoran
de todo lo que es la Institución Masónica, y que juzgan tan solo por referencia
o por apasionamiento a ésta o aquella causa.
Si la Masonería atacara a
alguna creencia o religión, no habría en su seno individuos que son a la vez
creyentes y masones, no tendría religiosos intransigentes y masones
convencidos. La Masonería deja a sus miembros la más amplia facultad de pensar
y creer; pero se rebela contra toda invasión fanática, cualquiera que sea la
forma en que se presente; pues todo extremo o exageración en las ideas o
creencias es un vicio que exalta y que se combate sin tregua, teniendo presente
para ello “Que el hombre es libre para todo, menos para ser esclavo”. La
Masonería, institución altruista y tolerante es a la vez escuela, templo,
academia, que a sus labores intelectuales, añade los principios que rigen en la
vida las eternas enseñanzas de la más sana moral; que practica las virtudes más
elevadas tratando de hacer efectivo “Amaos los unos a los otros”.
Como escuela, es una
institución sobre bases objetivas fundadas en verdades evidentes. En filosofía,
no da preferencia a ningún sistema, porque si es sensualista arruina los
principios espiritualistas; rinde culto a la razón, atributo del hombre; pero
no da preferencia al racionalismo puro porque acabaría con todos los principios
metafísicos que son conocidos y respetados como principios fundamentales de
ideología, por eso vemos que su filosofía es ecléctica, pues así tienen cabida
todos los sistemas sin que exista la preferencia en ninguno, teniendo siempre
presente: Que la verdad es una y que los caminos por donde puede el espíritu
humano llegar hasta allá, son muchos. La Masonería nunca ha ido contra ninguna
religión, secta, ideología, idea, creencia ni bandería política; lo que ha
hecho en todo caso es combatir todo fanatismo y toda superstición; porque esos
vicios son la forma más exaltada de la razón, que pervirtiendo el entendimiento
y perturbando el criterio han sido la causa del extravío de las ideas que han
conducido a la humanidad a los errores más graves; de allí han salido las
guerras más crueles, como han sido las guerras religiosas, de donde nació uno
de los hechos históricos fanáticos religiosos más repugnables que la historia
recuerda con horror y se llamó “La Inquisición”; en el mundo moderno la guerra
fratricida en Irlanda, entre católicos y protestantes; en los pueblos del Medio
Oriente la imposición a la fuerza del Islamismo, etc.
La Masonería ha sufrido con
paciencia y resignación todas las persecuciones que le han hecho sus más
crueles y encarnizados enemigos; ha visto con ojos de piedad a sus detractores;
ha perdonado a todos aquellos que de algún modo la han escarnecido; pues
comprende que no ha podido ser entendida por todos, y en algunos casos por sus
propios adeptos, pues cuando llegue esa época venturosa en que todos los
hombres sepan lo que es la Masonería, ese día será en la tierra el reinado de
la libertad y la justicia regirá a las naciones y así habrá cumplido la
Masonería su misión y su obra, razón para que la Masonería deje de ser. La
Masonería no es una institución benéfica, como muchas que existen con fines de
mutuo auxilio; no, ella ejerce la caridad bajo todas sus manifestaciones; pues
la Masonería cree que, no son sólo mendrugos los que necesita la humanidad:
así, pues, un consejo a tiempo; una observación oportuna; una amonestación
conveniente; una reprensión sin acritud; una corrección sin avergonzar u otro
medio cualquiera de enmienda a las faltas, defectos o extravíos son también
obras de caridad que debemos emplear en favor de los hermanos y amigos.
“Compartir las alegrías y aliviar las penas” son deberes de fraternidad. “no
sólo de pan vive el hombre”.
La Masonería rinde culto
excelso a la virtud, adora la verdad, respeta la razón, lucha por la justicia y
ama el derecho, emanaciones del Gran Arquitecto del Universo. Los masones lo
consideran como el ser eterno y existente y es por ello que el humano es
inmortal, que se prepara en esta vida para otra eterna y futura, en idéntica
contraposición primero con la filosofía de la antigüedad y luego con las
doctrinas religiosas de occidente que circunscriben la existencia humana a la
vida presente.
Por tanto, estas dos
doctrinas: la de la unidad del Ser Supremo y la de la Inmortalidad del Alma
constituyen la filosofía de la Masonería. De ahí que en la historia de la
humanidad siempre encontraremos instituciones y asociaciones que enseñaran
estas verdades de un modo alegórico y simbólico, a pesar de desarrollarse
muchas veces en un ambiente en que predominaba el oscurantismo intelectual y la
degradación de las antiguas religiones politeístas y creo a tener derecho de
sostener que esas acusaciones fueron la inunabula, es decir los predecesores de
la institución masónica, tal como hoy día existe.
TEMPLO MASONICO
Como la palabra masón quiere
decir Albañil y todo en la masonería se enseña por medio de alegorías, el fin
de una sociedad de albañiles ha de relacionarse con el oficio que representa.
En el lenguaje masónico siempre tiene como objetivo primordial construir o
restaurar un templo. Este puede ser el templo de la naturaleza o el templo
interno, en que debe reinar la libertad, la igualdad y la fraternidad y se
enseñe la virtud y la moral propia de la Orden. La masonería es el estado ideal
del humano; es el estado en que él encuentra y conserva su perfección y su
felicidad. Este estado ha sido destruido por la religión, los dogmas y el
fanatismo. Estos han quitado a los humanos su libertad primitiva, su igualdad y
destruido su fraternidad. Por ello la masonería lucha por devolver al hombre su
perfección y felicidad original, su libertad, su igualdad y su fraternidad
natural.
LEYENDAS MASONICAS
El ritual masónico está lleno
de leyendas, sobre todo en los grados superiores, comenzando por el Maestro, en
que está la leyenda de la muerte de Hiram. En estas leyendas van envueltas las
alegorías para comunicar su luz entre los hermanos y ocultarse de los profanos.
La diferencia entre alegoría y símbolo es que este tiene un significado
puramente convencional, de modo que es imposible de que el que no está en el
secreto, lo descubra; la alegoría, en cambio, “es un discurso o narración en la
cual hay un sentido literal y otro figurado, un sentido patente y otro conexo,
siendo la intención del que usa el sentido patente la de indicar por analogía o
comparación, el figurado u oculto”. La interpretación de la alegoría es fácil,
y por eso alguien ha dicho que “la alegoría habita un palacio diáfano”. Por
ello todas las leyendas de la masonería son alegóricas y tienen su importancia
en su verdad histórica.
LOS SIMBOLOS
La iniciación no es más que el comienzo del
trabajo interno de la masonería. Luego viene un proceso de instrucción donde se
aprende el simbolismo de las leyendas. Todo es símbolo en la masonería. La de
los tres primeros grados suele llamarse también masonería simbólica, a
diferencia de la otra, que es la de los grados filosóficos. El símbolo es una
imagen sensible empleada para expresar un sentido oculto, pero analógico. Pero
esta imagen simbólica es solamente convencional, es decir, que no tiene más que
una relación convencional, acordada libremente entre los que usan, con la cosa
significada. Por tanto es imposible que el que no está en el acuerdo se dé
cuenta de su sentido. No sería posible que diera aquí el sentido simbólico de
todo lo que hay en una logia y de todas las ceremonias que se usan. Sería
menester mucho espacio para ello; tanto más cuanto que la significación de los
símbolos tienen sentidos diversos a medida que el iniciado se va internando en
grados y conocimientos masónicos.
Para ejemplizar lo anterior
vamos analizar el triángulo que representa el Gran Arquitecto del Universo, o
trinidad masónica, o sea, la naturaleza con sus tres reinos, mineral, vegetal y
animal. La palabra dios comienza en muchos idiomas con la letra D, letra que en
griego es un triángulo. En el medio está la letra G, que significa generación.
“Este dios trino, dice Ragón,
tiene tres misterios que simbolizan también los tres lados del triángulo: 1º
Todo es formado por la generación. 2º La destrucción sigue a la generación en
todas sus obras. 3º La regeneración, bajo otras formas, sigue los efectos de la
destrucción. Analicemos otro símbolo que es la piedra bruta, la piedra pulida.
La piedra bruta representa el trabajo de los aprendices que deben trabajar para
pulir sus perjuicios del mundo profano, Mientras que la pulida está trabajada
como lo hacían los obreros del templo de Salomón, al orden interior para la
construcción de su templo.